Los trabajadores del bar ubicado en el centro de la terminal de ómnibus están viviendo, una vez, más una situación injusta y complicada en la que se ven afectado su futuro laboral.
Este bar, que se encuentra conformado como cooperativa (Nubacoop) hace 7 años y cuyos 10 trabajadores son los actuales dueños, quiere ser traslado hacia otro lugar mas alejado, “escondido” de alguna manera, debido a una remodelación que se hará en la terminal. “Nosotros estamos en un lugar estratégico de la terminal y nos quieren trasladar a un lugar donde no pasa nadie y nos perjudica notablemente”, nos contaba Walter, uno de los integrantes y fundador de la cooperativa.
Esta cooperativa esta conformada desde el año 2002, cuando los anteriores dueños despidieron a sus empleados y éstos tomaron el local, en forma de lucha, durante 14 meses hasta que una jueza les permitió la continuidad del local pero a cargo los trabajadores, es decir, pasaba a mano de ellos mismos. “Pasar por lo que pasamos nos hace más fuertes y nos sentimos más seguros. Hoy no vamos a dejar que nos trasladen después de tanto esfuerzo y de 7 años trabajando de esta manera”, sostenía el trabajador.
La actual situación del bar es bastante complicada e injusta para los trabajadores de Nubacoop. El conflicto comenzó hace unos meses debido a la iniciativa de la remodelación de la terminal. Con motivo de esto se le ordena a la cooperativa, que se encuentra en el centro de la terminal, que se traslade a otro sitio, también dentro de la misma, pero donde no hay un mismo movimiento en cuanto a la gente y donde seguramente va a perjudicar económicamente al bar y a poner en riesgo el futuro de la cooperativa. En su lugar, los dueños de otro bar pretenden instalar allí su negocio. “No nos negamos a la remodelación de la terminal ni a pagar el costo de la concesión, pero si estamos en desacuerdo con que nos trasladen a otro lugar ya que nos perjudica notoriamente”, nos afirmó Walter.
Los trabajadores del bar se encuentran en una situación muy crítica y hasta amenazante ya que si ellos no firman ni se trasladan al lugar que les dicen, corren el riesgo de quedar fuera de la concesión. Sin embargo, la decisión de todos los compañeros de Nubacoop es la de luchar por su lugar de trabajo cueste lo que cueste. Por Carolina Zapata
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