Oficiales, profanos, académicos, serios, bizarros y también inolvidables. De saco y corbata o con camiseta y botines. En el Senado, en la UNR, en el bar El Cairo o en la cancha de Central. Oficiales, profanos, académicos, serios, bizarros y también inolvidables. De saco y corbata o con camiseta y botines. En el Senado de la Nación, en la Universidad Nacional de Rosario (UNR), en el bar El Cairo o en la cancha de Central. Desde su partida, el 19 de julio de 2007, el Negro cosechó tantos y tan variados homenajes como la simpatía que despierta su obra. Y el jueves próximo seguirá sumando: el Centro Cultural Bernardino Rivadavia pasará a llamarse Roberto Fontanarrosa. El reconocimiento será doble ya que vendrá acompañado de varias mejoras para el tradicional espacio (ver aparte).