Solanas: "Que el socialismo no pierda el tiempo con la UCR"

El líder de Proyecto Sur, Fernando Pino Solanas, aseguró que en 2011 su partido “le va a comer algunos puntos a las dos variables del PJ que hay y también a la nueva Alianza”, en alusión al radicalismo y las fuerzas que lo acompañan, entre ellas el socialismo. “Se les va a complicar a todos ellos”, pronosticó el diputado quien también, por esta razón, aventuró que le van a empezar a “tirar de todos lados”.

Solanas ayer estuvo en Rosario y encabezó un acto en La Toma (Tucumán al 1300), luego de pasar el jueves y viernes por Santa Fe y Paraná. 

“Dijimos que íbamos a construir una tercera vía, una alternativa al bipartidismo, y la elección pasada en ciudad de Buenos Aires demostró que nos votó gente que antes votaba a otros partidos”, declaró. 

Pino volvió tomar distancia de la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, al señalar que “se ha corrido muy a la derecha en estos años”. 

—¿Totalmente descartada entonces una confluencia con la UCR y sus socios? 

—Proyecto Sur nació como alternativa al bipartidismo, no queremos saber nada con quienes también usufructúan del autoritarismo kirchnerista, como la nueva ley electoral que pretende dejarnos afuera de la cancha a las fuerzas emergentes. En diciembre Cristina proscribió los artículos 108 y 109 para perjudicarnos a las fuerzas nuevas y todo el mundo miró para otro lado. Así que lo primero que exigimos, para empezar a hablar, es que repongan esos artículos. Además, en la foto de la semana de la UCR reunida vi al senador Oscar Castillo, de Catamarca, una provincia sitiada por fuerzas de represión. El pueblo de Catamarca no quiere la megaminería y la provincia es socia de minera Bajo la Alumbrera, acusada de contrabando agravado y que ha hecho una devastación contaminante formidable en los aledaños donde opera. Una provincia que tiene un régimen de lluvias de 200 milímetros anuales promedio, la minera le chupa gratis los niveles de reserva... Todos ellos son socios del nuevo modelo y nosotros no vamos a inducir al pueblo argentino a un nuevo engaño. Somos consecuentes antikirchneristas porque el kirchnerismo es menemismo-duhaldismo disfrazado de progresismo. Fíjese quienes son las espadas: Oscar Parrilli, José Luis Gioja, Miguel Pichetto, Carlos Tomada... ¡Los que no vienen del menemato provienen del duhaldismo! ¡Aníbal Fernández, el ministro coordinador de gabinete! ¡No falta nadie: la galeria no se acaba con Frankenstein y Drácula! Y lo que hay enfrente, es repetir una nueva alianza. 

—¿Y qué le va a plantear al socialismo en la reunión prevista para el martes? 

—Ellos vienen a explicanos, son ellos los que han solicitado la reunión. Nosotros hemos tenido siempre relaciones muy cordiales y trabajado proyectos conjuntamente con los socialistas y el GEN. Respetuosos y agradecidos de que quieran explicarnos esto y los famosos 10 puntos, pero la Argentina necesita mucho más que 10 puntos: hay que recuperar las rentas extraordinarias, parar de pagar una deuda jamás investigada, reconstruir el tren para todos y reponerle a las provincias el ferrocarril como primer paso de reactivación de las industrias y las economías regionales. Solamente los intereses de los fondos en el Banco Central sobran para la reconstrucción del ferrocarril. 

—Usted mantiene un discurso nacional cuando ciertas encuestas apuntan que podría quedarse con Capital Federal. ¿Ya decidió a qué candidatearse el año que viene, si a presidente o a jefe de Gobierno porteño? 

—Todo eso todavía está abierto porque nosotros trabajamos para un proyecto nacional y federal, por eso llego a Rosario, estuve en Santa Fe y Paraná. Pero también me preparo para gobernar la ciudad. A fin de año, cuando celebremos el tercer congreso de Proyecto Sur, vamos a sacar las redes que hemos tirado y veremos dónde es más útil llevar adelante nuestra propuesta. 

—¿Usted le va a comer la porción del electorado más de izquierda al kirchnerismo? 

—Perdón: nosotros captamos no sólo gente que simpatiza con la izquierda. El discurso mío es un discurso que lo toman las grandes mayorías nacionales. La gente esta harta de votar la variante PJ, que va a haber dos, o una nueva Alianza cuyo último gobierno duró dos años, tuvo que irse en helicóptero y nos dejó la mayor catástrofe económica y social. Y además fue tan democrático que en dos años de gobierno nos dejó treinta y tantos muertos por la represión. No me puedo olvidar de esto. Y ahora están los mismos: aparece Jesús Rodríguez, Storani, Moreau, Cobos... Julio Cobos es el vicepresidente de Cristina porque fueron socios en el 2007 cuando Kirchner dio luz verde a reprivatizar el petróleo. 

—Pero eso ocurrió en varias provincias donde se vencían los contratos. 

—En Chubut Das Neves privatizó hasta el año 2047 yacimientos de Cerro Dragón y todos los gobernadores de las provincias prolongaron las concesiones. También Julio Cobos, siendo gobernador de Mendoza, prolongó por otros 30 años las concesiones petroleras. No hay diferencias en toda esa pléyade. ¿O usted cree que hay diferencias entre Eduardo Brizuela del Moral, con su modelo asociado a Bajo la Alumbrera, y José Luis Gioja, en San Juan, asociado a la Barrick. Por eso estamos contra el bipartidismo, queremos un cambio democrático y en paz pero atacando las causas reales. Proyecto Sur está convencido que va a captar a millones de argentinos que están esperando otra cosa, y nosotros somos la fuerza nueva, la fuerza del cambio, los que podemos transformar la Argentina y eso ha prendido tanto en la juventud. Por eso, le diría a los socialistas que no pierdan el tiempo con estas variantes. Con los compañeros socialistas, le repito, los respeto y no tengo mayores diferencias. Sin dudas, si pudiéramos formar una alianza con el socialismo y el GEN podemos terminar ganando en 2011. No me caben dudas de esto.

—¿Por qué hay otras prioridades a Papel Prensa? 

—El suministro de papel a los diarios, a igualdad de precios, tiene que estar controlado por el Parlamento para evitar las manipulaciones del gobierno de turno o de cualquier grupo económico. Pero mucho más prioritario para los argentinos es la garrafa de gas. ¿Cómo es posible que se especule y se le robe a los ciudadanos más modestos que usan la garrafa para cocinar y calentarse? En algunos lugares la están pagando 60, 70, 80 pesos cuando el contenido de lo que hay adentro vale apenas dos o tres pesos. 

—La clase media, con red domiciliaria, paga mucho menos el metro cúbico, claro ejemplo de subsidio al revés. 

—El pobre paga 50 veces más de lo que pagamos nosotros. Lo mismo con quien usa el celular a tarjeta, los sectores más modestos de la población, millones de argentinos que terminan pagando tres o cuatro veces más que si tuvieran abono. Es un aprovechamiento cómplice de millones de argentinos, un saqueo. ¿Y por qué no interviene el kirchnerismo? Porque es socio de las grandes multinacionales, las corporaciones financieras y mineras, exportadoras de granos, petroleras. Ese es el esquema kirchnerista, por supuesto bien disfrazado de progresista. Son tan hipócritas que dicen que no pueden pagar el 82 por ciento móvil a los jubilados; unos cararrotas cuando reponiendo los aportes patronales al 100 % ya obtendrían la mitad del dinero, y la otra cuarta parte la cuentan del superavit del Ansés.